Dibujo tu nombre sobre la arena
y lo escribo lento en una piedra.
de la arena, el viento lo destierra,
pero sobre la piedra aún queda.
Escribo tu nombre en las nubes
lo trazo firme sobre el concreto,
y quisiera saber si tú los vez,
escritos con mi amor y esmero.
Sobre un espejo empañado
tu nombre, lento, he dibujado,
lo trazo firme y con cuidado
y así, un rato quede marcado.
Escribo tu nombre sobre la luna
porque ahí por la eternidad perdura,
las estrellas se encelan una a una
porque tu nombre no le dí a ninguna.
Plasmo tu nombre en mis poemas
aunque ésto nunca no lo supieras,
y así, el día en que ya no estuviera,
en mis palabras aún permaneciera.
Escribí tu nombre donde pudiera
y tatué tu nombre en mi corazón,
y así podrá borrarse de donde sea
pero jamás, de mi alma y corazón.