Amante de poetas clandestinos
En el lujuriosa perfume de la prosa
Tiene encuentro tu alma con la mía
Para desvelo de sueños, fuego de pasión
Que enciendes inevitablemente tu palabra
que escribes en mi piel como un libro ardiendo.
Callamos la lagrimas que no escribimos
amarnos en cada tinta que nuestra pluma teje
En una sabanas blanca como papel sediento de pasión
Un juego que rosa lo prohibido en cada encuentro.
Amante que se aman, poeta porque en su piel tejen
Lo que prohíben los ojos ajenos de la intolerancia,
Clandestino en el arte de amar en silencio.
Amantes poetas clandestinos del destino que le roban
Un segundo para encender la pasión de sentirse vivo
En el secreto mundo del corazón tenemos encuentro
Y desgranamos cada palabra para encendernos aun en la mirada
Y en un suspiro cortado por un beso…
Solo tú y yo.