Espérame allá en el cielo si algún día mueres,
Si Dios te hace primero partir de aquí;
Espérame y dame un beso a mi llegada
Porque estaremos juntos de nuevo allí.
Espérame en el cielo porque esta vida
No será suficiente para entregar
Todo el amor que siente mi alma perdida,
Perdida por tus besos y por tu amar.
Espérame paciente porque no hay espacio
En todo el universo para ocultar
La conexión que tienen tu alma y la mía,
Que solo Dios eterno podría borrar.
Espérame en el cielo que allí compartiremos
Lo dulce de lo eterno, la vida sin final;
Donde no habrá dolor, ni llanto ni lamentos;
Donde por fin las almas tranquilas vivirán.
Espérame en el cielo que allá en lo sempiterno
Al fin podré tenerte y amarte sin final,
Besarte, acariciarte, vivir juntos en pleno;
Siguiendo este idilio creado en lo terrenal.
Si Dios a mi primero la vida me arrancara,
Seré quien por ti espere con ansias tu llegada,
Para vivir la muerte contigo dulce amada,
Soy tuyo, tu eres mía y nada nos separa.