EN LA CUMBRE MAS ALTA,
ARRODILLADO EN PLEGARIA,
UNA FIGURA ENCORVADA
MUSITA EL REZO DEL SOL;
HA ANOCHECIDO EN SUS OJOS
Y LOS SIGLOS MARCHITARON
SUS GLORIOSOS BRAZOS.
PERO SU CANTO MÍSTICO Y LEJANO,
SUS GUERRAS LIBRADAS Y GANADAS.
PERDURARÁN POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS.
QUIZÁS SU ENHIESTA FIGURA OLVIDADA
YA NO AHUYENTE AL OSADO FORASTERO,
PERO SU VALIENTE ESPÍRITU DE GUERRERO
SERÁ SIEMPRE GUARDIÁN CON VOLUNTAD FERRÉA
DE LA CIUDAD AMURALLADA QUE ESTÁ
ENCLAVADA EN LO ALTO DE LA SIERRA.