No volverán las negras alas de pasiones,
muertos los besos, muertas las almas…
El cuervo ha danzado sobre las mortajas
No queda indicio de sus pasos… no volverá…
Anochecer crujiente, interminables las horas
Que se desquitan con cada tropiezo en la pared
Un tic, tac resuena a mis espaldas y el bulto cada vez
Más pesado se vuelve…
No estará el que aligere mis penas y mis ansias
No volverán sus negras alas a cobijarme,
Las estrellas brillan a lo alto y mis ojos destellan
Rocíos salados que caen al vacío…
ese misterioso ser de inmortal esencia, dejó en mi
la locura y se llevó mi conciencia…