Estamos ante tantas cosas andando en lo mismo...
que nos agotamos de tanta energía buscando algún mimo.
Por desparramarnos garabateamos pronto dulcesito en jugos
y en las entrelineas convenimos darnos
pancito y cariño.
Nos morimos de hambre
con tantas miradas que tenemos cerca
y en el ,sin embargo, dejamos librada
la fe a una tecla.
Nos descogotamos las noches enteras
apurando letras
y sobrevolamos la magia inaudita
de alguna chistera.
Por si entre las dudas
nos quedan, a veces, algunas certezas;
están las arrugas mostrando con creces
nuestras carreteras.
Y aunque conducimos un auto pequeño
de ilusiones vagas
nadie nos protege y un amor promete
rodar sobre nada.
Pero entonces siempre
suena extraordinrio, por lo menos, algo:
Que en las pretenciones de escribir poesía,
por soñar, estamos.