Si no te vuelvo a ver te secuestro.
Voy a amordazarte con besos y caricias.
Mis besos cerrarán tu boca e impedirán que recibas socorro del aire, nada te salvará de que me trague tu voz; y mis caricias afirmarán tu rostro, lo amarraré al mío para que nos besemos por siempre. Acariciaré tus párpados para que no cierres tus ojos mientras te hago mío eternamente.
Mis brazos serán las sogas que amarren tu cuerpo en un abrazo, no te podrás zafar del nudo de mis manos, vivirás en mi regazo hasta que se me antoje.
Te sentaré en mis piernas como si fueras un niño.
Si no te vuelvo a ver ejecutaré mi terro-amorífico plan para buscarte, te alcanzaré aunque te hallas escondido en una estrella muerta.
Madame Shalom