He vuelto a la realidad
sintiendo vacío mi pecho,
perdóname…, por lo que e hecho
evitando la sinceridad.
No merece tu alma
la desdicha del amor,
que causan dolor,
y te hacen perder la calma.
No deseches el amor
a pesar del sufrimiento,
ya llegará el momento
en que pase tu dolor;
¡no fue mi intensión!...
matar tus ilusiones,
ni causarte decepciones
con tan cruel decisión…
Se que siempre has sufrido
por lo mucho que has amado,
y nunca han recompensando
lo mucho que has querido,
el destino cruel a sido,
porque siempre te ha negado
la dicha de ser amado,
y muy bien correspondido.
Pero no te desesperes
ni reniegues del destino;
que pronto habrá en tu camino,
quien de amor por ti se muere.
Vivirá, en mi mente
los recuerdos vividos,
pero el destino a querido
que se destruya el puente;
no te llenes de maldad,
por todo lo que has vivido,
que si un mal ha venido
es para la felicidad…
Si has perdido un sueño
es porque, el destino a preparado
uno más puro y sagrado
para que seas tu el dueño.
Tal vez, en tu camino deje abrojos,
y te hieran las espinas,
o tal vez en las esquinas
¡Viertan llanto tus ojos!...,
y esas gotas cristalinas
del amor con sus lazos;
no caigan en los vasos,
de cerveza en las cantinas…
porque aquel licor amargo
que dice matar las penas;
al circular por las venas,
el sufrimiento lo hace largo.
¡Yo, en mi soledad,
pediré por tu alegría;
noche enteras con su días
sin ninguna maldad,
posiblemente, no creerás
en mi noble sentimiento
y pensando que miento
seguramente me odiarás…
Es preciso terminar
con este falso sentir,
es mejor ahora partir
y volver a comenzar.
Tal vez, has pensado
que mi amor te esquiva;
justo cuando ibas
a estar ha mi lado…,
porque tal vez a llegado
a mi vida otra ilusión,
para tomar esta decisión,
que la alegría te ha negado;
en mi vida solitaria
estará el recuerdo vivido,
de lo mucho que has querido,
e invocare al cielo mis plegarias.
Y así…, la mujer que amaba
en cada palabra que decía;
una parte de mi alma partía
y una ilusión apagaba…
Me dijo con su cara mustia
al verme, tan lleno de angustia…
Ya llegará otro amor,
más sincero y fiel,
y más dulce que la miel
a calmar tu dolor.
Y así dejo mi alma vacía
sin cariño y sin amor,
que casi me mata el dolor
al verla cuando partía.
Escribir más… ¡ no puedo!....
se llena de angustia mi pecho;
en la sombra de mi lecho
solo y triste me quedo.