Alejandro

Que lamentos

Los renglones torcidos

y mi alma,

que si descalzos, que si astillados,

que si el hastío sin sazón

de los pecados.

 

Jugar a jugar

que se juega,

hacer trampa y empezar

la suspensión de un punto

hasta que crezca.

 

Fumar para tratar

de hacer silencio

y pellizcar en el viento

las palabras

que no alcanzan...