Entraste a mi vida como una invasión
Tus ojos fueron el arma que traias mejor
Conquistaste con éxito todo mi corazón
Cubriendome totalmente de tu gran pasión.
No tube defensa para resistir a tu amor
De inmediato me debilité al escuchar tu voz
Y me empezó a gustar eso de vivir con vos
Y de que me abandonaras tenia el temor.
Lograste formar un gran imperio:
Tu ejército dentro de mi alma se dezplegó
Pero no me amabas, solo fue una ambición
Y al retirarte, junto con tu imperio se destruyó mi corazón.