necesito la influencia de tus ojos
para observar los cotidianos días que me rodean.
Tus oidos
para oir las palabras
que dirigen la melancolía
de la soledad dentro de mis pensamientos.
Tu piel
para sentir el mundo del cual soy parte.
Necesito de tus labios
para percibir la sensibilidad
de los sentimientos.
Necesito de ti para existir
y hacer de mi un ser infinito,
sabiendo de la finitud de mis días.