an4rchos

Calle Utopía

Iba a tomar el avión
justo cuando el corazón me partió
lleno de luces que abrían
más tarde esta triste poesía

No pido colores ni estrellas
ni lunas ni cosmos explotando
Debí decir todas aquellas
que me tienen hoy lamentando

Detesto al reloj y su oficio
que cada segundo trabajando
mantiene mis noches recordando
lo que hace el sacrificio

Puedo escribir sobre el cielo
y la lluvia que cae en el cemento
describir en un sentimiento
Pero me atrapa la reina del hielo

Cada día lo veo todo en vano
aun así hago lo que puedo
porque no se trata de si puedo lograrlo
si no de no hacerlo y lamentarlo.
¡Sí! Que romántico es el utópico,
que utópico es el romántico.

¡Es así! Bienvenido a Calle Utopía,
aquí se vende la esperanza
una historia que desembarca
a la vuelta de la esquina,
en cada rincón de tu alma.