Eleotpeka
Poema sobre educaciĆ³n
Dicen que va en franco declive
la enseñanza media en Chile
Comprobarlo un padre quiso
y asaltó, sin previo aviso,
a su hija quinceañera,
que, con modales huraños,
con evidente impaciencia,
con tono de displicencia
y prostibulario atuendo,
así le fue respondiendo:
- Háblame de Paulo Sexto
- No está en mi libro de texto.
- ¿Y Juan Pablo Segundo?
- A ese siempre lo confundo.
- ¿Y doña Juana la Loca?
- En este curso no toca.
- ¿Y quién fue Cristóbal Colón?
- Que se yo de ese huevón Y de Napoleón Bonaparte- me dan ganas de matarte
- Pues di un pintor español.
- Eso no entra en el control.
- ¿No sabes quién fue Picasso?
- No. En esa materia paso.- Y de Neruda o Mistral- Sigo pasando igual- Sabes de Teresa de Calcuta- Lo mismo que tú, por la puta- y sobre Hurtado de Mendoza ¡Me preguntas cada cosa...!
- ¿Cuándo acabó la Edad Media?
- Pues vendrá en la Enciclopedia.
- - ¿Y qué fue la Reconquista?
- Si me dieras una pista...
- ¿A qué equivalen mil gramos?
- ¡Pero si eso no lo damos!
- ¿La ecuación de primer grado?
- Pues tampoco la hemos dado.- ¿Qué son los números primos?
- Esos jamás los vimos.
- ¿Y sabes mucho latín?
- ¡Lo dices con retintín...!
-Y algo de inglés o de griego
- ¡Se escriben raro! ¡Me niego!
- ¿Quién fue Ortega y Gasset?
- Lo miraré en Internet
- ¿No estudias filosofía?
- ¿Para qué me serviría?
- ¿Y has dado Literatura?
- No lo sé... No estoy segura.
- ¿Quién compuso "La Odisea'"?
- No tengo ni puta idea.
- ¿Quien pintó La Mona Lisa?
- ¡Y yo qué sé! Me das risa!
- ¿Donde está la Capilla Sixtina?
- No viene en el libro, atina.
- ¿Y Calderón de la Barca ?
- ¡Uy, papi, no seas rasca!
- ¿Pio Baroja, Miguel de Unamuno...?
- Pues no me suena ninguno.
- ¿Algún autor del Barroco?
- De eso sé bastante poco.
- ¿Quién fue el Manco de Lepanto?
- Papá, no preguntes tanto.
- Pero, ¿no leéis a Cervantes?
- ¡A ése lo leían antes...!
- Lo tuyo, hija, es deplorable...
- Pues he sacado notable.
- Y de ciencias, ¿sabes algo?
- Me voy, que esta noche salgo.
- Pero, entonces, tú... ¿qué sabes?
- ¡No me esperéis; tengo llaves!
Y el padre quedó perplejo
al mirarse en el espejo
se encontró cara de idiota.
Musitó una palabrota
y fue a meterse en la cama.
Así acaba este epigramaQue continuará mañanaCon distintos personajesPero con el mismo drama.NOTA: Estos versos lo saqué de una página web especializada en anecdotas, aportados por Juanfro y que parodiaba a la educación en España. Yo solamente lo adapté a la realidad chilena.