Quiero besarte los pies,
poco a poco, despacito;
por senderos de caricias
escalarte los tobillos;
enredarme entre tus piernas,
en tus muslos ser camino,
que me haga hallar en tu cielo
la esencia de lo Divino...
Quiero hacer surco en tu vientre,
y libar miel en tu ombligo;
a las flores de tus pechos,
empapar con mi rocío;
embriagarme en tu perfume,
palpitar con tu latido,
hacerte un collar de besos,
y una diadema de mimos...
Quiero morderte los labios,
absorber tu aliento tibio,
en el fuego de tus ojos,
quemarme cuando te miro;
en tu piel sembrar luceros,
y explorar el infinito;
descubrir nuevas estrellas,
y contemplarlas contigo...
Quiero que, uno por uno,
te degusten mis sentidos,
tocarte, olerte, mirarte,
que seas música en mi oído;
saciarme de tus sabores,
para hacerlos todos míos.
Y renacer en tus brazos,
si me mata el estallido,
de mi alma al sentir tu beso
transportarla al paraíso...