Creo que para nosotros
lo físico ya no existe,
estás y no estás,
extraño tu presencia y ausencia.
Eres cuando no eres,
me hablas con tu silencio,
me acurrucas cada noche
tus manos, tiernas,
tienen la textura de una sábana.
Dime, cómo has logrado
transformarte en sol cada mañana,
cálido y radiante
me saludas desde la ventana.
Cómo, por las noches
te vistes de plata, hermoso
reluces sin pausa
vigilas mi sueño, te quiero
gracias por cuidarme, enserio..