Fragancia que surca en los aires
Manantial que desborda mi pasión
Fuiste en mí anhelo, deseo, atracción
Aun lo eres entre las distancias que dibujamos
En esa línea que ambos tememos nuevamente romper
Rincón de luz perpetua que ilumina mis ojos
Eso eres en las noches de este quien te grita
El grito de la angustia por no verte
Palpitante, sonriente y danzante
Viniste a este mundo para yo sentarme a pensarte
Comandaste una guerra en la quise perder y ser un esclavo de tu querer
Plantaste en mí la semilla
Y hoy germino lentamente convertido en la planta del amor
Noche mágica la que vivimos
Vida en la que quiero que tu estés.