Sin rima,
sin prosa,
sin sentido,
sin cuerpo,
así me siento.
A la deriva,
cansada,
aburrida,
con nostalgia.
En espera,
en espera de días mejores,
de momentos mejores
de amigos que vuelven.
Ah como añoro viejos tiempos
Tantas risas,
tantos abrazos,
miradas tan simples pero tan profundas
que me llegaban al alma.
Pero qué he de hacer,
nada solo esperar.
Y vivir con lo que tengo,
con lo que hay hoy a mi alrededor.
Y aprender,
aprender de los errores y aciertos.
Ah pero qué más da si al final todo será igual.
¿O no?
Acaso el simple hecho de sobrevivir una etapa
me hace más fuerte,
será acaso que es así que formo
mi propia prosa,
¡mi propia rima!
Kathy Murillo Acuña Sep. 2008