Alexander Vortice

VALOR AÑADIDO

AL final del camino

me encuentro con el inicio

y sé

que debo irme

lejos,

muy lejos…,

tan lejos como una brizna

de aire que manoseó las pestañas

de la diosa infortunada

la noche aquella

donde las copas eran grifones

y el cigarro amable

eran mi insuperable

valor añadido.