En tus brazos,
guardándome de los peligros del amor,
de la ingratitud de la vida,
del sentimiento confuso y de las pisadas falsas del destino.
Sobrellevando las inquietudes,
los altercados entre corazones rotos,
las diferencias y las similitudes de pensamientos grotescos de almas erradas y heridas por la flecha de Cupido.
Conociendo las calles por donde paso lo que hoy no existe,
descubriendo lo dejado en corazones rotos y destruidos,
conversando con quienes juzgan siendo culpables.
Estoy en ti y estas en mi,
sin pensamientos puros; pero si sinceros.
Constantemente mirándonos en las dificultades del existir diario;
pero no rutinario,
conquistando cada día lo que sentimos perder,
como si fuera la primera vez, un primer beso o un primer te amo.
Agradeciéndonos a cada instante la llegada,
la existencia y la tolerancia de nuestras diferencias.
Esperando diariamente lealtad,
sinceridad, honestidad y dedicación de nuestra parte.
Existes,
aunque para el mundo seas invisible;
aunque las dificultades nos agobien.
Existes,
porque estas en mi,
porque te siento y porque quiero q así sea.
Te encuentro en mis noches frías,
en mis noches de sueños húmedos,
eróticos y excitante,
en mis canciones favoritas,
en mis caminos perdidos,
en mis lagunas mentales
y hasta en la piel que arropa mi alma.
Estas aquí…… cerca… y dentro de mí…
Estoy allí,
donde tu me has colocado,
donde quieres tenerme,
donde siento que me tienes.