Hicimos teatro cuando
no sentíamos dolor,
cuando no existía el miedo
ni había dudas, ignorábamos las sombras,
callábamos las voces
y nos jugábamos nuestra última actuación.
No buscábamos nada
ni si quiera un reencuentro,
mucho menos el eco
del mar muerto ó
el oleaje del viento en el oto
Nos alejamos
y hoy
tan sólo te vuelvo a ver.