(Recuerdo de un orgasmo)
Escucho todavía
tus cantos de sirena
tus gritos de ave frágil
enjaulados.
Todavía me pregunto
cómo puedes
en ese abismo
hacerte aroma tan fino
y cómo tienes tantos rostros
en instantes que eternizas
explosiones de estrellas
en el cielo.