Andrés Mª

De mi cuaderno \"Naufrago del tiempo\"

¡Cómo lloran los cristales de mi cuarto,

mojando la calle y el cielo!

Desde un sillón de la estancia

contemplo el llanto, sin ecos,

y el trueno –eterno gemido-

escribe en mi pluma

el impulso de otro poema.

El relámpago lejano

fotografía imprudente

mis palabras de papel,

destruyendo el negativo.

Ya no lloran los cristales:

el viento sopló en mi ventana

y por la calle y el cielo

sigue el llanto de la tarde.