Dejemos de vivir el pasado, inventemos un bello presente…
Cuando la tristeza me embarga
al ver que nuestro amor que era tan fresco y espontáneo,
muchas veces solo es una amarga rutina,
que tiene mucho de previsible e irritante,
poco de amor y libertad…
Perdida entre mis fantasiosos pensamientos,
solo sueño que esta noche quisiera sentirte
como antes, la primera vez…
Fatigado y con problemas siempre tú,
alguna vez entre tus preocupaciones
y locas ansiedades…
¿te acuerdas del primer beso?
me acuerdo que fue tímido, tierno
y hasta medio torpe,
pero luego sin hablar
nos entregamos a un beso francés
lleno de pasión pero con incauta terneza.
No quisiera que todo ese brillo y luz
que alguna vez tuvimos se perdiera…
Cuando duermes tranquilo en nuestra cama,
yo estoy desvelada pensando
en esas hermosas noches,
en la que los dos estábamos sumergidos
en el medio de la romántica y calurosa oscuridad,
abrazados soñábamos que ese momento no iba a acabar,
no queríamos que amaneciera…
¿Por qué ahora no me abrazas?
estas frío como un hielo cuando empieza a congelarse,
mi corazón aún sigue teniendo
el calor que me diste esas noches…
No quiero seguir añorando el pasado,
un pasado tan maravilloso
que con solo un día de ellos
podría iluminar todos mis años…
Se que tú también te das cuenta
que estamos fallando,
que de a poco dejamos morir nuestro brillo,
que como una estrella fugaz
en algún momento se podría llegar a apagar…
Dejémonos ya de reproches…
alimentemos la luz de nuestra relación,
con besos, ilusión e imaginación
encendamos el brillo del amor…
que por estar ocupados en otras cosas
casi lo hemos extinguido…