Hoy me recosté de ti.
Fue perfecto sentir tu calor;
sentir tus brazos alrededor de mi.
Tu perfume me encanta.
Tus labios me matan.
Acaricias mi cuerpo con ternura;
llegas a lugares que jamás he revelado.
Mi corazón se acelera,
todo fluye dentro de mi.
Acaricias mi cuello,
mi cintura,
mi figura suave y desnuda.
Aquí estoy ante ti;
sin secretos ni silencios.
Surge un beso
y me recuesto de tu pecho.
Tu corazón está acelerado;
yo lo escucho latir.
Tu perfume y el mío se mezclan,
nuestras manos se juntan,
juegas con mi cabello,
mientras yo guardo silencio.
Si supieras lo que pienso;
me encantan cada uno de tus gestos.
No me quiero separar de nuevo;
cada segundo junto a ti es perfecto.
Mi cuerpo aún se estremece con tu recuerdo,
mi ropa lleva el olor de tu perfume
y dormir se me ha hecho imposible.
Siento que sigo soñando despierta.
Obviemos los momentos de incomodidad.
Prométeme que nada entre nosotros cambiará.
Sé que lo que he sentido
no es en vano
y te confieso,
que has llegado mucho más allá
que cualquier otro.
Por favor, quédate ceca.