El desvarío ,
correr en dirección opuesta ,
a la realidad , lo cuerdo ,
ponerse la locura por chaqueta.
Andar volando ,
como una niña ,
con una super nueva bicicleta .
Vuelta a disfrutar ,
degustar , saborear ,
una magdalena
o aquella rancia galleta .
Aquello de que
esa mancha de mora
con otra verde se quitaba
y aquella cabaña de indios ,
que con un poco de viento ,
al suelo la tiraba ,
la ilusión de construirla,
todos los días rama por rama.
Convertir la hierba mojada ,
en tu cama ,
la luna por almohada
y las ranas en príncipes ,
que las estrellas ,
a la boca te bajaban .
Volver a aquel abrazo ,
la caricia por nada ,
con que gracia te regañaba ,
la Madre ,
esa justa gran dama .
Casi poder tocar ,
en buscar esa niñez ,
que tenia por perdida ,
acabada ,
y por momentos casi olvidada .