Soy la dama; de las sobras,
la que se acuesta cual zorra,
con la temible y apacible oscuridad,
la luna putería sin esperanza,
viene a invadirme con su vanidad.
Soy la dama; silenciosa,
que camino sin lugar,
sin posar los pies sobre este suelo,
que ni brilla, ni vive, ni muere.
Soy la dama; cobarde que se oculta,
que se oculta de la luz,
no quiero esa estùpida esperanza,
no existe, para mi murió.
Soy la dama; silenciosa,
que gime y llorar por amor,
como la leyenda antigua de la llorona,
pero yo no lloro por mis hijos,
por que no tengo alma, ni patria, ni dios,
simplemente soy yo.
By Jhosury Yagel Rotcaf Odeim