Desnudo, en perfecta conjunción con tu propia esencia.
Manjar de suaves frutas y dulces vinos.
Aromas de virilidad que doblegan mis anhelos.
Aún dormido me torturas.
En tu desnudez me atormentas.
Desposeído de ropas, vestido de ti me seduces.
Y quiero ser tu prisionera, la eterna presa de tu desnudez.
Tú, tu cuerpo mi cárcel.
Tú tus brazos y piernas, muros de mi prisión.
Tú, tu boca, ventanas y puertas a mi libertad.
Tú, tu espada mi rendición.
Tú, desnudo... yo cautiva.
NOA