zhely

Silencio, el eco pide su turno.

Silencio, el eco pide su turno,

en la intemperie del dolor ajeno;

silencio, el eco pide su turno,

en las llagas de lo venidero.

 

Silencio, el eco pide su turno,

no más silencio de la periferia;

silencio, el eco pide su turno;

lo desgarrador de mi recelo.

 

Silencio, el eco pide su turno,

habitación vuela en lo inmenso;

silencio, el eco pide su turno,

fósforos de fuego consumen terciopelo.

 

Silencio, el eco pide su turno,

y la bruma se enclaustra en el vacío;

silencio, el eco pide su turno,

y la pared regresa sólo manto enrarecido.

 

Silencio, el eco pide su turno,

yace cuerpo dormido por infinito;

silencio, el eco pide su turno,

y el eco detiene su rumbo.

 

Silencio, el eco pide su turno...