Traigo el amor
en un altar invisible
fluyendo desde mis entrañas, agitándose
dentro de un lentísimo cauce.
Traigo el amor
reunido de muchas noches
acumulado de otras vidas
desembocando en calladas bahías
Yo traigo el amor
ceñido por un muro de arena
es un cálido mar agonizante
que sube en una noctámbula marea.
Traigo el amor
desdoblándose, rugiendo salvaje
en la curva añil del horizonte
extendiéndose listo para desparramarse.
***
Traigo el amor en palabras indecibles
en ondas oscuras que corren
como un fuego inextinguible
rompiendo el aire incontenible.
Voy en la amargura, así lo traigo
dentro un géiser dormido o un volcán de nieve.
¿Por qué se me evapora y se me reduce en una charca pequeña?
Se estanca en una presa que no condensa.
Lo traigo como un gato encerrado en una caja
arañando, golpeando, incendiando mi tristeza
a veces lo siento a punto de desbordarse y desplomarse
pero nada, esto es culpa de tu presencia.
Porque en ocasiones junto a ti
todo lo que traigo de repente se congela
en una pulcra azul ola de cristal
y no la puedo derramar.
***
Traigo el amor
en una semilla que no germina en flor
me duele que no te pueda llenar
y en ti no puede gotear.
Vida mía, pero te escribo esto para advertirte
traigo este manantial lleno de peces que avanzan y crecen
y no por mucho tiempo los podré contener
más vale que te prepares, porque van por ti.