CIERTO DIA
Cierto día paseaba
a orillas de un limonar,
oyendo a un lindo jilguero
que en su trino amenizaba
el paisaje donde estaba.
Quedéme tan embobado,
que renací enamorado...
Más acullá una jilguera,
excitada en la noguera,
amor gozosa esperaba.
DICEN
Dicen que soy hombre tan raro,
que solo y sin nadie estoy,
que por el sendero voy
en mi andar cuán solitario.
¿Vivirá otro ser al claro
con su soledad en sí?
Mirando hacia atrás volví.
Encontré en la esquina viendo
a otro que estaba sufriendo
los males que padecí.
(salvador)