joaquin Méndez

Un cuento de Hadas.

 

 

Sentado en la barra de un  bar,

Con el alma entristecida por la pena,

De haber perdido a mi amada, 

De pronto apareciste tú en la puerta

Como arrancada de algún cuento de Hadas


 Te acercaste lenta mente al mostrador

 Tu tabaco de tus manos cayó al suelo

Yo me agache amable mente a recogerlo

Tú me dijiste muchas gracias caballero


¿Qué  te pasa bella dama?  Pregunte

¿Porque tienes el rostro entristecido?

Hace poco caballero contesto,

Hace poco  he perdido a mi marido


Si te sirve de consuelo te diré,

te diré  que a mí me pasa lo mismo

Yo también he perdido a mi mujer,  

hace tiempo se marcho con un amigo.


Por eso… no vale la pena que tengamos que llorar

Ven,  tomemos unas copas,  y empecemos a olvidar


 Tomamos varias copas los dos juntos

En todo el tiempo no parábamos de hablar

Pagamos la cuenta y nos marchamos, 

y salimos a la calle  a pasear


Al llegar a la puerta de tu hotel,

 iluminada por la luz de una farola

Me dijiste por favor sube conmigo,

que esta noche no quiero quedarme sola


Me besaste  en la boca  al entra en tu habitación,

Quise decirte mil cosas pero me quede  sin voz

Y  se  unieron  nuestros  cuerpos

  Igual  que  el  cobre  fundido

Fuego  salía  de  tus  labios   fuego  salía  de  los  mío


Ya  nunca  olvidare  la  habitación  de  aquel  hotel

Donde  hicimos  el  amor  por  vez  primera

El  invierno  que  azotaba  ya  mi  vida,

En  un  instante  lo volviste  primavera


As dejado mi corazón limpio de espinas

Y de aquel viejo dolor no queda nada

Te metiste para siempre ya en mi vida

Para vivirla como en un cuento de Hadas.


Autor: Joaquín Méndez. 17/01/2011.