Tuve conciencia, vi la sombra mia;
negra muy negra, sobre el camino de la muerte;
y vi tu sombra blanca que decia,
sus plegarias a los angeles de mi suerte.
Harto estoy de mi presencia;
de las palabras y de todo lo que me rodea;
de la miseria y los golpes de la vida;
Harto de los azotes de dios;
y el pesado cargar de la vida;
soy picota de inquisicion;
animal herido por los golpes del cazador.
Harto de ser soñador;
de vivir en las nubes, mirando el temor;
harto de caer y de levantarme;
sin respirar y sin lamentarme;
Harto del vivir; siempre a mil,
harto de volar, y no caminar;
harto de morir sin vivir