A veces se me junta
la tierra con el cielo,
sintiéndome atrapada
sin hallar salida...
Busco una salida
que me de consuelo,
pero sólo veo el suelo
y un laberinto que me conduce
a una sin salida.
Sintiéndose en tinieblas
mi corazón de frío tiembla,
al darse cuenta
que lo congeló tu olvido.
Y...es que no sé
si te he perdido,
te has evaporado,
quedando un silencio inerte.
Yo no se si pueda ya tenerte,
o tendré que pensar
que nunca te he tenido.
¿Pero cómo pensar
que nunca yo te tuve?
si entre mis brazos
acariciarte pude.
¡Cuántas veces me embriagué
con el elíxir de tus besos!
¡Cuántas veces tú me amaste
antes de salir el alba!
¡Cuántas veces juntos
vimos morir la tarde,
cuando se derretía
el sol en el horizonte
dejándolo teñido
de púrpurina sangre.
¡Cuántas veces me dijiste
yo te quiero con el alma!
¡Cuántas otras yo te dije...
yo por ti de amor me muero!
Pero hoy siento un dolor
que desgarra mi alma,
tengo la sensación
de que nunca me has amado,
tengo la sensación
de que conmigo hubieses jugado.
Te fuiste dejándome el dolor sembrado
y una espina en el pecho,
que aún, no me he sacado
y una herida tan profunda
que no ha cicatrizado.
Felina