Mi padre
El alma la vida, ferviente
Deseo del bienaventurado
Caminar sobre el lecho negro
De la muerte, encaminado sobre
La moral de lo triste e irreal de la vida.
Pasos agigantados acompañados con el
Afán del cansancio de los años,
Virtud ajena del sollozante
Derramando las mil lagrimas de su
Difunto recuerdo, el ayer, el hoy
Y el mañana serán para recordarte.
Te fuiste en un viaje sin regreso,
En los primeros días de enero, libraste
La batalla más grande y ardua de tu vida
Los demás corazones pusieron la fe
En la esperanza de volver a verte caminar
Entre nosotros, pero nos falto mas fe.
El cielo despoja el alma del cuerpo
Y la tierra clama la carne
La impaciencia y el enojo se han ido contigo
Para serte sincero hoy prefiero oír tus enojos
Por que ahora solo reina el silencio que
Ha dejado tu ausencia…
Las palabras de halago, ternura, de arrepentimiento
Y de desahogo al igual que el llanto ya no servirán
De nada al difunto señor de nuestros recuerdos,
Hoy solo quedaran los testigos de tus hazañas, tus
Aventuras, tus viajes, de tus picardías y algunas
Fotos que conservaran tu recuerdo.
Ahora solo nos queda luchar contra el paso de los
Años para no olvidarte…
MI AMADO PADRE