tu poeta romantica
una historia increible
Nadie comprendía como me sentía solo me decían que hacer sin siquiera preguntarme como me sentía hoy. Mi única consolación era que podía estar cantando sin que nadie me digiera algo. Siempre estaba encerada en la casa no salía, no me divertía, solo hacia labores de la casa.
Pero tenía a mis mejores amigos conmigo peluche y tom que era mi perro y mi gatita que siempre que me veían triste me lograban hacer reír.
Pero como siempre todo llega a su fin peluche empezó a envejecer y tristemente falleció pero tenía la seguridad de que me cuidaría desde el cielo. Tom y yo quedamos solas solo vivíamos de recuerdos y ya no era lo mismo. El tiempo paso yo envejecí alado de tom que nunca se separo de mi lado pero un día ya no desperté, tom intentaba despertarme, me habla, me mueve, me lambe y yo fría; de tanto intentar despertarme tom se dio cuenta de que era inútil porque yo ya acompañaba a peluche en el cielo.
Tom se entristeció ya no comía, no quería jugar y no se despegaba de mi lado la soledad acabo con ella y a los pocos días murió. Mis dos amigos nunca me dejaron sola siempre estuvieron a mi lado y también después de la muerte.