(esperar 22 segundos de la música para leer el poema)
Vengo de una secreta tierra lejana
donde sus campos son fruto de vida;
todos los amores tristes en caravana
son curados por esta mano elegida.
No se preocupe que tengo las curas
de todo tipo y para cualquier razón
deleitando con mi magia de locura
pasional al sentimiento del corazón.
Es que son tantos en los desamores
que viven nadando hombre y mujer
pagando penas con interés de temores
en el alma y la vida sigue su recorrer.
Frente a tal batalla dada en cuestión
brebajes, pócimas, mezclas de color
serán efecto inmediato de sanación
liberando a los condenados de dolor.
Mi efectividad es apenas casi perfecta
porque siempre he revertido temblores
en aguas donde había de belleza selecta
que por sacudidas filtraron sus sabores.
La dirección, es la estrella más vistosa.
Mi teléfono, sabrá por la brisa escuchar.
Los horarios de atención, son poca cosa.
El costo del trabajo, nunca deje de amar.
Vito Angeli