Hay cartas que se dirigen al destinatario lejano
pecaría en mentir si hablo de todas,
las mías hoy son releídas infinidades de veces
pues mis cartas son para mi
Escribo para mi
pues el remitente es quien más me ama
quien mejor me entiende
con quien converso entre carta y poema
música y café... tabaco
y un mate tal vez
Pues en el papel de ambos me siento querida
entre blasfemas y elogios
compartimos horas de letras
angustias, tristezas. desconsuelo
mas hoy ufana estoy
Y quien no ha de estar satisfecho
al advertir la complicidad consigo mismo
sin la subordinación de algún remitente
sin la preocupación de no ser solo tu, yo.
Contenta me expreso hoy,
que con mi retiro y abandono,
formo grandes amistades con la melancolía y la nostalgia,
con mi gran locura e insensatez
mas leyéndome hoy soy feliz.