Son las cinco y seis de la tarde
y el tiempo esta ido en un nostálgico sueño,
el viento canta tonos melancólicos
y tristones, al cielo mancha una nube
de coloración singular.
Y la mirada fija solamente puede estar.
El pasado no cabe , tampoco
el futuro; todo es un eterno presente.
Una marcha funeral lleva el pensamiento
a su rumbo.
¿Dónde esta el tiempo? Yo no lo siento.
¿Acaso un insecto dará el tono
a la tarde?. Sublime el pensamiento
que hoy me acosa y algo efímero es el consuelo ideal.