Mariela

Como un poema.

Las palabras van apareciendo despacio en mi mente y despacio van dando forma a los contornos de tu piel, dibujando con palabras tu silueta bendita.

 

Llegan verbos fugaces que se conjugan ante la luz misteriosa de tus ojos. El sustantivo de mis versos fue sustituido por los adjetivos de tu amor.

 

En mi cabeza revolotean preposiciones, y van dirigiendo mis dedos mientras juegan en tu piel a policías y ladrones.

 

Siento como de mi boca salen oraciones, que recorren los caminos de la tuya hasta convertirse en párrafos extensos y llenos de vida.

 

La salud de las negaciones peligra ante el río de afirmaciones que desbordas para mi, convirtiendo los versos en prosa y formando el poema que me declara el amor que sientes dentro de ti.