Tu dices que soy tu nave
tu dices que soy tu tren
que te gusta mi rugir
que te gusta mi vaivén
pero hay algunos indicios
de otro carro en el andén.
Si es que te gustan de a dos
podemos hacer la orgía
o si bien tu lo prefieres
el de noche y yo de día
y así pasamos la vida
toda llena de alegría.
Haciéndote yo el amor
como gozo vida mía
como loco subo y bajo
formando la algarabía
hasta soltar bien adentro
todita la sábia mía.
Ya viene el segundo turno
mantente bien preparada
con la cosita bien limpia
y todita perfumada
pues te van a dar sabroso
en esa linda rajada.
Los dos nos encargaremos
de mantener bien dotada
de placer y sabrosura
tu conchita alborotada
hasta que al fin te dejemos
por cojuda descarada.
Manuel M. Teles (El Diamante)