Hoy podría escribir de los trozos de vida más incomprensibles
Donde todo parece menos, y la respiración parece nada,
Cómo un alma blanca toca tantas vidas turbulentas.
Como la comprensión se mimetiza con el agua cristalina,
Ayer, después del amanecer, dos siluetas, danzan desnudas.
Dos seres pierden el silencio, han dejado el amor,
La soledad, tiene el sabor agridulce de amores.
Las palabras flotan entre el espíritu y la piel,
El sabe que nadie muere mientras viva en el alma
de alguien, en palabras sonoras o silencio profundo.
El viento norte se encuentra con el canto de los peces libres,
Flor de cada noche, pies húmedos que despegan de la tierra,
Tus pasos han cambiado mis pasos, tu ternura bebió de la mía,
Amada no tengo la virtud del canto ocasional, mi alma gira.
Flor de cada noche, sueños perdidos, captura del silencio.
Asi, viviré, entre rocas, equivocaciones, sueños y despedidas.
Amada, ya no estás, el tiempo se ha fugado entre los dos,
Cada palabra, cada paso, o un vuelo de pájaros te llevaran,
por las esquinas, ascensores, puentes vertederos del olvido,
caminare marcando las huellas de tus pasos sin huellas.
En algún momento me iré, cansado, de hacer lo que dejaste,
El tiene la dicha de tenerla sin tenerla, flor madura, flor de agua,
Las heridas se cierran, ella vive curiosa, ella vive en la despedida.
Tienes la propiedad de mi piel y mi alma, no estás y te sigo.
El se tiende a dormir, ya las olas humedecen sus pies….adios.