La que espera infinitamente,
se esconde detras de las sombras
mujer sin lugar certero donde amar
esperando la fecha y la hora
caminando siempre en la duda y los celos
amparando sueños imposibles
la de la conformidad obligada
quien abre su puerta de madrugada
mañana de sol, desolada
vacia quedo la almohada
llorando penas acostumbradas
de verlo con ella ya estoy cansada
de sentirse además desamparada.
Pero en fin asi es ella
el segundo plato de la cena
la reunión con amigos
el trabajo hasta tarde
la excusa, la llamada privada, los mensajes borrados
si, que mas voy a decir
solo el placer, compañía de unas horas,
delante de la gente ni saluda
nunca se deja ver,
pues podría a su amante comprometer
su nombre solo esta en su mente
si, si esa soy yo
siempre estoy,
claro siempre voy a estar,
porque mal que me pese la amante solo soy.