El blanco era el algodón
El negro éramos nosotros
Y vaya la suerte que tuvimos.
El blanco vino
Nos sacó de nuestras casas
Nos hizo sus esclavos
Y sembró de terror nuestros caminos.
El algodón no tuvo la culpa
De nuestros aciagos destinos.
La culpa fue del hombre blanco
Y nuestro sino.
Campos de algodón
Negros desatinos.