Me susurra secretos, canta canciones antiguas y tristes.
Grita mi nombre, o mis otros nombres sin miedo
en cualquier sitio donde el amor provoca.
Imposible de consolar, vigila mis quimeras.
A veces me arrastra hasta el fondo de mis sentidos
y permanece quieta como si solo existiéramos los dos.
Me revela el mundo que conozco y un poco mas.
No se cansa nunca de alimentar mis secretos.
No puedo traicionarla porque su amor es infinito.
Alma de mis lunas y mis canciones.