La vida son circulos
y yo volvi a entrar en uno,
aunque pense que ya lo habia superado,
es mas fuerte que una droga,
me domina por completo.
Las esmeraldas me embrujan,
me llevan del mar Caribe, al mar Pacifico,
me pasan de la paz a lo agitado,
se apoderan de mi mente, de mi ser.
Las veo, me miran,
cual mirada de serpiente,
saben embrujar,
saben en que momento atacar,
solo ese verde intenso,
esas esmeraldas saben como
adueñarce de mi voluntad.
Me sacas del desierto del silencio,
para entrar en el mar del dolor,
me ofreces el paraíso,
y solo me das la soledad,
embrujo de esmeraldas,
que me robas mi tranquilidad.