Hermana mía , mujer sensible, temperamental.
mujer valiente,
en ti recuerdo el amor paterno,
abrazador, solidario y consecuente.
Y el amor materno: leal, entregado,
desposeído de vanidad y perenne.
En las telas proyectas, tus sueños, tus ansias,
eres como la arquitecta que construye
la ilusión de los artistas repletas de ornamentos
para que en ellas habiten sus anhelos.
Gaviota en el aire, tu vuelo es etéreo,
pajarito inquieto de cantar sonoro.
Deambular nocturno de sueños fantásticos
y el sueño a tus ojos se niega por ellos.
No descansa el alma fabricando anhelos
que proyectas firme sobre el escenario
donde otros artistas lucen los atuendos
que hicieron tus manos , bordando sus sueños..
en ellos te elevas y te inmortalizas
y el público aplaude esos movimientos
por ti disfrazados.
Todo lo que es tu vida danza en el escenario.
Lo que tus manos crean, lo que tu alma sueña:
Sueño de vuelo y de lluvia;
sueño de flores y gotas de rocío;
sueño de amor y de olvido,
sueño de pájaros cantores, sueño de truenos.
De olas y de playas donde, sobre las arenas
repose tu mente, repose tu alma……
Ponle alas a tus sueños y que ellos te eleven
Sobre las estrellas que tú has dibujado
En trajes de nocturnos embelesos.
A los sonidos de tu alma ponle acordes y un poema
para que tus labios de palabras apasionadas
inventen la más bella canción: tu canción.
Deja que ese capullo comprimido que llevas dentro
se abra como la más bella flor como esas
Que sabes ornamentar.
Deja que su aroma y sus matices
te sustraigan del dolor.
Y sus pétalos caigan sobre tu corazón
para que le abras la puerta al amor.
Refléjate en el espejo de la vida,
Y en ella contempla tu más bella obra:
¡La hija de tu amor!. Abrázala y entrégale
tu comprensión y, dile cuanto la amas
en ese abrazo cargado de emoción.
Vamos hermana, sal con ella a la vida
y gocen lo mejor de ese momento.