CAROL ECHEVERRY

CASI REALIDAD

Sentí tu voz una mañana

al despertar y descubrir

que era la dulzura que un bello sueño emana

y suspiré cuando mis ojos abrí,

sentí tus manos en las mías

de repente ya no te ví

y mis manos quedaron frías

no estaba tu calor como creí,

sentí tu presencia junto a mí

pero sé que ya no estás aqui

simplemente al recordar

que una noche habías muerto al exhalar.