Lo llaman el loco
Al pobre linyera,
Que lleno de harapos
Y su soledad,
Arrastra sus penas
Por esas veredas,
Él pisa la tierra
Pero está…más allá.
Su rostro nos habla
De una honda pena,
Quizá allá lejos
Feliz supo ser,
Tal vez el destino
Le cambió los dados,
O a este estado
Lo llevó, un mal querer.
Quién puede decirnos
Que en su “otra vida”,
Tuvo alguna historia
Digna de contar,
Puede que haya sido
Dueño de una empresa,
O en noches de juerga
echó todo…a rodar.
A pesar que a veces
Puede meter miedo,
Los chicos lo quieren
Y los grandes también,
En ciertos momentos
Saca un viejo libro,
Su rostro se transforma
Y se pone…a leer.
Tiene entre sus bienes
Un sin fin de esquinas,
Yal buzón amigo
Lo saluda al pasar,
Le cuenta secretos
A la vieja luna,
El linyera errante
¿Qué historias…tendrá?.
Quién puede arrogarse
El decir que es cuerdo,
Y que incluso diga
Que tiene la verdad,
Si los actos cotidianos
Más simples nos hablan,
De seres humildes
Que regalan…bondad.
Boris Gold