Te vestiste de azul,
Y conseguiste opacar el cielo,
Tu amor lo guardo en un baúl,
No me lo quites, no me tires al suelo.
De azul, tan linda, tan como el mar,
Inmensa, radiante, mas que hermosa,
Dime como ¿Cómo no te voy a amar?
Si eres más bella que cualquier rosa. . .
Mi niña, mi linda alegría,
Vestimenta hecha en un telar,
Tu sonrisa provoca al odio ‘alergia’
Y al amor siempre invitas a pasar.
Una furtiva imagen surca mi cabeza,
¿Quizá el paraíso? ó ¿Un Ángel?
Deslumbra, te veo, eres tú. . . mi princesa,
Mi reina, mi vida, me cuidas, ¡Mi Arcángel!
Tan pequeña eres cuando te entregas,
Tal como cenicienta vendrás a mí,
Solo que a las doce no te iras,
Puesto que nunca de mi corazón, te dejare salir.