Dicen que llegando a los cuarenta y nueve años
se pierde la cuenta , porque llega el cin-cuenta.
Pero para mi eso ya es pasado, porque como son cincuenta y cuatro, tuve cuatro años para empezar las cuentas nuevas y los años ahí vienen cargados, y aunque diga mi amigo, Alvaro, que no sé hacer cuentas, en cuestiones de edad, aunque me pese, las llevo bien calculadas. Me hubiese gustado estacionarme en los cuarenta, es una buena edad, se dice de quien la tiene que es una persona madura , interesante, pero como soy egolatra, me gusto aunque tenga la edad que tengo y me seguiré gustando más alla de los setenta, -Dios mediante- si es que vivo pa contar. pero quisiera lucir muy joven, sin que nadie me quite lo vivido, que es requetebastante, de ahí mi experiencia y amor por la vida.
Ahora poniéndome seria, les digo con amor a mis amigos del portal a mis familiares , que si, que he vivido mucho, que me he equivocado más, y que a pesar de haber amado mucho, aún siento que me falta encontrar el verdadero amor.
La vida me dió muchas cosas buenas y malas, entre las buenas, en primer lugar mis padres , mis hijos y el resto de la familia. Mis padres porque me enseñaron a ser un ser humano con valores; mis hermanos porque iban abriendo el camino, para que el mío sea más fácil; mis hijos porque me han dado satisfacciones al verlos realizados y felices y porque me dieron los nietos, que son la miel de mi años; mis amigos porque me enseñaron a ser leal y afectuosa. Y entre las cosas maravillosas, que me ha dado, es haber conocido esta página, porque , aqui me cercioré aún más que tengo sensibilidad y encontré gente maravillosa. que han sabido tenderme su mano en momentos duros para mi.
A más de eso, la vida me dió, capacidad. Una y otra oportunidad, después de tantos errores, y aún asi, me he sentido, una mujer afortunada, creo que soy inteligente, no necesariamente una lumbrera, sencillamente inteligente, que alcanza para valorar lo bello por encima de lo que no es bello como el odio la envidia y la ambición, lo importante y destacado por encima de la mediocridad. Y ante todo, me dió la capacidad de AMAR, amar sin medida y sin diferencia y restricciones. Ese es el mandamiento más importante que Dios nos impone , saber AMAR, , quien no lo hace comete el peor de los pecados. Hoy a mis cincuenta y cuatro años, le doy gracias a Dios y la vida , por ser lo que soy y como soy.
Volviéndome a lo nuestro, les agradezco amigos del alma, por las muestras de afecto, por la cantidad de mensajes, privados y por el muro, Me siento bien por eso. ha sido el mejor de los regalos. Dios les bendiga a todos.
Les entrego mi cariño sincero. Y cuabdo digo sin-cero digo: sin cero de todo lo que les debo, mil amistad y mil amor, mil besos, mil abrazos a todos.
Disculpenme si me extendí.